martes, 29 de noviembre de 2016

De vuelta después de una larga ausencia

Como lo dice el título de esta publicación, han pasado algunas semanas desde la última entrega y es que estas semanas han sido de locos: primero estuve literalmente tirado (en cama) durante una semana por una faringitis que se complicó un poco y que decidió unir fuerzas con una divertida alergia. Por si fuera poco, tan pronto empecé a sentirme mejor, los días comenzaron a hacerse más y más largos en la oficina (los cuales aún continúan), y al llegar a casa lo único que quería era dormir... aunque para serles sincero rara vez lo hacía de inmediato.

En fin, sólo quería hacerles saber que sigo vivo y que espero estar de vuelta pronto con más aventuritas y datos curiosos sobre las tortugas semi-acuáticas, particularmente las tortugas pavo real.

Les dejo algunas imágenes del nuevo hábitat que armamos para Rafa, Leo y Mikey, heredándole el anterior a Donny para que haga y deshaga a su antojo (por fin pude deshacerme del acuaterrario temporal... bendito aguinaldo). Después les daré más detalles sobre esta nueva adquisición pero hasta entonces ¡que tengan una excelente semana!


La nueva casa de Donny:


El nuevo habitat de los 3 alegres compadres:

martes, 1 de noviembre de 2016

Decoraciones para acuaterrarios (1era parte)

Han pasado varios días desde que publiqué algo y por ello me disculpo con todos ustedes. Han sido días un tanto ajetreados y desde el domingo vengo cargando con una gripa/catarro que verdaderamente me ha tumbado (con decirles que tuve que pedir permiso en la oficina de trabajar desde casa porque no podía ni con mi alma).

Pero bueno, el tema de hoy tiene que ver con la decoración para nuestro acuaterrario. Cuando recién adquirí a mis tortugas lo primero que hice fue hacerme de una pequeña montañita de plástico (¿?) que pudieran usar para secarse, lo cual estuvo bien, y 2 bolsas de grava para acuario, lo cual no estuvo tan bien y en un momento les explico por qué.



La grava es inofensiva para nuestros pequeños amigos acorazados siempre y cuando el tamaño de sus cabezas y, principalmente, de sus bocas no exceda el tamaño de las piedritas que la componen ya que de no ser así nuestras tortugas pueden llegar a tragarlas lo que puede ocasionar una de dos cosas: 
  1. Que se les atasque algún pedasito de grava en su garganta (que hasta donde yo sé es la menos probable).
  2. Que coman tanta piedritas y por ende sus cuerpos se vuelvan muy pesados provocando también una de dos cosas:
    • Que ya no quieran sumergirse en el agua y por lo tanto haya que operarlas para sacarles la grava del estómago.
    • Que sea tal el peso que ya no puedan subir a tomar aire y se ahoguen (tortugas como la pavo real no pueden respirar bajo el agua ya que se trata de una especie semi-acuática).

Por fortuna pude enmendar mi error a tiempo (gracias nuevamente a esa visita tan oportuna al veterinario) convirtiendo el acuaterrario en un lugar libre de grava evitando así cualquier tragedia.

Si bien la grava le da un toque colorido al habitat de nuestros pequeñines, la verdad es que no aporta valor alguno al lugar y puede llegar a ser peligroso (a menos de que estemos hablando de peces, moluscos, crustáceos o de un bonito y simpático bambú miniatura). Muchas veces es mejor que el hogar de nuestras tortugas sea funcional y poco estético (esto se puede ir afinando con el tiempo) a que sea un paraíso visual y un pequeño (pero muy real) infierno para nuestros animalitos.

Pero bueno, ya pasado el "susto", busqué otro tipo de piedras que si fueran turtle friendly y que sirvieran como parte de la decoración del mismo. Entre ellas encontré en mi jardín algunas de buen tamaño y otras las compré en la Jungla de Timo (sería rico si me pagaran por las menciones). Si mi memoria no me falla, estas últimas son piedra bola (si, así se llaman) y al menos las que yo adquirí venían en una bolsa de 5 kilos (también sirven las piedras de río).



Para el caso de las piedras que encuentren en la naturaleza, lo primero que deben hacer es limpiarlas muy bien y hervirlas (como si fuesen a preparar una rica sopa de piedra). Lo que vamos a hacer con esto es curar o desinfectar las piedras para que estas no vayan a afectar la salud de nuestros pequeñines una vez que entren en contacto con las mismas. 

Y bueno, hasta aquí esta primera entrega de "Decoraciones para acuaterrarios". Como siempre espero que esta información les sea de utilidad y ya lo saben, cualquier duda, aclaración, sugerencia o comentario la pueden dejar con toda confianza en la parte de abajo.

¡Hasta la próxima!

miércoles, 26 de octubre de 2016

Demasiado bueno para ser verdad

Después de casi 6 días de paz y tranquilidad en el acuaterrario comunal, hoy, durante mi hora de comida me percaté que Donny, dígase por aburrimiento, territorialidad o quizás sólo porque sí, empezo a morder no sólo a Rafa (con quien tuvo sus primeros encuentros) sino que ahora "agarró parejo" y también empezó a molestar a Mikey y a Leo. 

Tan pronto noté este comportamiento me puse a observarlos detenidamente para ver si no eran mis nervios hablando, pero desgraciadamente este no fue el caso ya que Donny si bien no buscaba "pleito" todo el tiempo si le soltaba pequeños mordiscos al caparazón y a las patas de sus hermanos cuando los tenía a una cabeza de distancia. Por lo que no tuve más remedio que separarlo inmediatamente. 

Por fortuna tenía todo lo que necesitaba para armar nuevamente un segundo acuaterrario con todo y todo (filtro, calentador, etc.), y el resultado fue el que se muestra en la imagen de abajo.



Definitivamente si hay algo que no falta con estos animalitos es un poco de drama de vez en vez para ponerle sabor a toda esta experiencia.

Y tan inocente que se ve Donny...



Ya sólo nos falta ver si Rafa no vuelve también a las viejos modos. Pero bueno, ese será tema para otra publicación. 

¡Seguiremos informando!

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Actualización 27/10/2016

Así es como se ven ahorita los 2 acuaterrarios en mi habitación.



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Actualización 28/10/2016

Ya le armamos a Donny un espacio para que pueda descansar y hacer su saludo al Sol matutino.

martes, 25 de octubre de 2016

Filtro para agua

A unos días (entre 2 y 3 días para ser exactos) de haber adoptado a mis pequeñines noté que el agua del acuaterrario tenía un tono amarillento y un ligero aroma a... bueno... a lo que asumí eran desechos de tortuga. 

Cuando decidí hacerme responsable de estos maravillosos seres pasé muchas cosas por alto y entre esas cosas está el hecho de que estos animalitos son muy poco higiénicos y suelen ensuciar con tremenda facilidad su habitat por lo que requieren de constantes cambios de agua para que su acuaterrario no apeste y que ellos se mantengan limpios y saludables (al final de cuentas el agua es donde pasan la mayor parte de su tiempo). Para ello hay 2 maneras de atacar el problema:
  1. Cambiar el agua de la pecera de 3 a 4 veces por semana o
  2. Hacerme de un buen filtro para agua y cambiarla de 1 a 2 veces por semana

Así que me incliné por la opción más obvia y llamé al acuario en donde había adquirido a mis tortugas (Acuario Sendero). Dado el tamaño de la pecera de la que me había hecho el mismo día (5 galones si se llena completa, si mal no recuerdo) me recomendaron el filtro F800 de la marca Dophin.



Según el dependiente de la tienda ese era de las mejores opciones de acuerdo a mis necesidades momentaneas y también era de las opciones más económicas (más o menos $300 pesos mexicanos). Así que no dude más y lo compré.

El filtro (que debe ir completamente sumergido en el agua) contiene lo que es una esponja que se encarga de absorber mucha de la suciedad que se acumula en el agua con el pasar de los días y además tiene una pequeña cajita con carbón activado (que debe cambiarse de preferencia después de 2 o 3 semanas de uso) que sirve básicamente para purificar el agua en donde viven nuestras tortuguitas. 

En cuanto a funcionamiento el filtro cumple con su función bastante bien, mi única queja es que al ser un producto aparentemente asiático y de no contar con un manual de uso (digamos que aprendí a usarlo a la "mala"), hay muy poca información en internet. Fuera de eso es una buena opción para acuarios pequeños.

Ahora bien, cuando mude a Leo, Rafa y Mikey al acuaterrario que, hoy puedo decir orgulloso, también comparten con Donny, tuve que hacerme de un filtro que tuviera la potencia suficiente para limpiar los 80 litros del lugar (recordemos que la pecera anterior tenía una capacidad de 20 litros aproximadamente de los cuales sólo usabamos 10). Así que en mi ignorancia acudí esta vez a las capaces manos de los dependientes de la Jungla de Timo quienes me recomendaron un filtro para 30 galones de la marca AquaClear.



De acuerdo a sus comentarios los filtros de cascada externos son mucho más efectivos que los internos además de que suenan como si tuvieras una pequeña fuente en tu cuarto (algo que llevo queriendo desde hace muchísimos años siendo un amante del agua como buen Piscis que soy). 

El precio de este filtro es de aproximadamente $800 pesos mexicanos y así como la opción de Dophin también contiene una esponja y una pequeña bolsa com carbón activado. Aunado a esto también tiene una bolsita con algo a lo que en la caja llaman BioMax lo cual ayuda al desarrollo y crecimiento de bacterias benéficas para nuestro acuaterrario.



Llevo cerca de un mes con este último filtro y la verdad estoy muy satisfecho con el trabajo que hace y la cantidad de cambios de agua que me ahorra.

Así que ya lo saben, si se encuentran en el mismo predicamento en el que yo me encontré en su momento, ahora cuentan con 2 muy buenas opciones que les hará más fácil el cuidado de sus tortugas (o incluso peces).

Como siempre, espero que esta información les sea de utilidad. Cualquier duda, aclaración, sugerencia o comentario, es bienvenido en la sección de abajo.

¡Que tengan un excelente martes!

domingo, 23 de octubre de 2016

A contar tortugas: 1, 2, 3, 4

El viernes sucedió algo que pensé que no volvería a acontecer. Todo empezó cuando estaba en la oficina y recibí un mensaje de mi mamá diciendo "hice una travesura". Conociéndola como la conozco, pensé inmediatamente en mis tortugas (que también se han vuelto su adoración) ya que normalmente cualquier cosa fuera de lo común, desde hace 2 meses, resulta ser algo relacionado a mis pequeñines.

Después de algunos segundos (que parecieron horas) comentó, muy inocentemente, que había movido a Rafa nuevamente con Mikey y Leo, lo que sinceramente me sacó de mis casillas. Ustedes recordarán la publicación de "Rafalandia" en donde independizamos a Rafa por estar molestando a Mikey en el acuaterrario comunal y dónde le dimos una emotova bienvenida a su etapa de adolescente terco y resongón. Sin embargo, después de regresar a su antiguo hogar, Rafa parecía haber resuelto sus conflictos con Mikey (aparentemente tuvo mucho tiempo para reflexionar), según comentaba mi mamá (quien al menos no les quitaba el ojo de encima).

Horas más tarde llego un mensaje aún más perturbador que el anterior y este decía "hice otra travesura". Por supuesto que nuevamente pensé en mis tortugas y esperé a que me diera el detalle de lo que había hecho en ese momento. Cuando por fin recibí su respuesta mi sangre se heló... mi mamá había movido a Dony con sus hermanos Leo y Rafa (este último es a quien le declaró la guerra antes de que lo sacáramos del antiguo acuaterrario) y a Mikey lo había separado del grupo. Claro que esta noticia me puso histérico (al igual que a mi hermana). Rafa con Mikey y Leo era una cosa, pero Donny nuevamente a lado de Rafa era otra cosa muy distinta (digamos que los mordiscos de Donny hacia Rafa era un poco más violentos que los de Rafa hacia Mikey).

Por más que intentamos persuadirla no logramos que regresara a todos a sus respectivos acuaterrarios asegurándonos que ella los estaba vigilando (lo cual era cierto) y que todos se estaban portando muy bien, como cuando eran más pequeños. Aún y cuando esto no me dejó 100% tranquilo, decidí confiar en que tan pronto ella viera algún indicio de agresión entre las tortugas, ella las separaría pero para mi sorpresa eso no fue necesario.

Cuando volví a casa me encontré con una "travesura" adicional que no me había compartido por saber como reaccionaría (ah, las madres...). Resulta que Mikey también hizo acto de presencia en la reunión familiar y ahora todos estaban juntos nuevamente... conviviendo...tranquilamente... sin agresiones ni nada que se le parezca (y vaya que cruzaban caminos constantemente aún y cuando el acuaterrario es muy grande). Esto me dejó completamente anonadado y sin palabras. Realmente creí que mis tortugas ya no iban a volver a estar juntas en un mismo lugar, incluso me había resignado a tener que tenerlas a todas en acuaterrarios separados llegado el momento (como creí que había sido el caso de Donny y después de Rafa). Sin embargo, todo esto destrozó completamente lo que yo creía con respecto a mis tortugas y me dio un poco de esperanza.

Llevamos 3 días observandolas (básicamente todo el fin de semana) y hasta ahorita no hemos tenido ningún percance. Ni siquiera hemos visto algún indicio de posible agresión entre los 4. Tal vez el espacio en el que estaban conviviendo anteriormente era muy chico, tal vez hacían falta algunas decoraciones (como plantas de plástico y un cofre echa-burbujas) o tal vez sólo fue algo temporal. Lo que es cierto es que hasta el momento Leonardo, Rafael, Donatelo y Miguel Ángel están conviviendo nuevamente como si nada hubiera pasado entre ellos, lo cual me alegra bastante (por muchas razones).

Esto definitivamente amerita un ¡COWABUNGA!


P.D. El título hace alusión a la adaptación en español de la tema musical de entrada de la serie de las tortugas ninja del 2003.

viernes, 21 de octubre de 2016

Yin y Yang

Hace varios días noté que Rafa se estaba poniendo más güero (decolorando) pero no fue hasta que lo juntamos con Leo (con quien siempre se llevó bien y a quien siempre consideramos como su alma gemela por diversas razones) cuando notamos la enorme diferencia en tonalidades. 


Estuve investigando un poco en internet pero no encontré algo que hiciera referencia a esta curiosa transformación (salvo algunos comentarios mencionando que con la edad las tortugas se hacen más claritas... pero pues Rafa aún es muy joven). 

Ya lo estuve revisando pero mi ojo inexperto realmente no ve nada raro o fuera de lo común. De hecho se le ve tan saludable como sus hermanos por lo que dudo que tenga alguna enfermedad grave.

De todas maneras voy a seguir observando a mi Rafita y a seguir investigando sobre el tema (incluso consultare a nuestro veterinario de cabecera) para asegurarme de que todo esté en orden.

Si ustedes se han topado con una situación similar o saben de un caso como este, no duden en contactarme, siempre estoy abierto a cualquier dato que pueda ayudarme a cuidar mejor a mis 4 pequeñines.

¡Seguiremos informando!

jueves, 20 de octubre de 2016

Memes tortuga

Hoy mi mamá descubrió cómo agregar textos a imágenes desde su celular y dado que la mayoría de sus experimentos fueron con fotos de mis pequeñines me gustaría compartirlos con todos ustedes en esta publicación. Ojalá los encuentren tan simpáticos como yo.




miércoles, 19 de octubre de 2016

Se acerca el invierno



Faltan un par de meses para que empiece el invierno y esto sólo significa una cosa en el mundo de las tortugas: la hibernación. Con respecto a este tema he escuchado opiniones encontradas. Por un lado hay personas que dicen que es bueno que las tortugas hibernen tal y como lo harían en la naturaleza; y por otro lado hay personas que prefieren mantener a sus tortugas activas durante todo el año para prevenir una serie de padecimientos que pueden presentarse en estos animalitos durante este periodo de inactividad por las bajas temperaturas.

En un inicio la idea de la hibernación no sonaba tan mal ya que es un proceso normal en algunos animalitos, pero después de leer algunos artículos y como buen padre aprensivo que soy, he decidido mantenerlas activas durante esta difícil época del año en primer lugar por el tamaño que tienen mis pequeñines, su edad y por último, pero no menos importante, para evitar que sufran enfermedades respiratorias durante el proceso (y más con el clima tan cambiante y extremo que tenemos en el norte de México) que puedan llevarlas a una partida prematura (leí que la mortalidad en tortugas que hibernan en cautiverio es muy alta al menos durante sus primeros años de vida).

Como consecuencia de esta decisión, tuve que recurrir al mejor amigo de todo padre/cuidador/guardián/dueño/sensei de animales acuáticos: el calentador con termostato integrado. Durante los años que duró la dinastía Borby me hice de uno de estos calentadores porque en época decembrina mis pecesitos se entumían bastante y casi no comían. Este calentador fue pasando de generación en generación hasta llegar a las patas de los nuevos y más recientes integrantes de la familia. Todo era miel sobre ojuelas hasta que Donny y Rafa decidieron independizarse y salir del acuaterrario comunal.


Como Donny fue el primero en ser separado el fue el que salió ganando ya que el calentador se quedó en su hogar provisional pero ahora que se acerca un pequeño frente frío (al parecer este fin de semana la temperatura va a bajar a 15°C) nos entró el apuro de conseguir al menos un calentador más para Mikey y Leo (por tener el acuaterrario más grande) mientras Rafa y Donny se turnan el otro ya que tenemos pensado construir un acuaterrario en donde puedan estar los 2 sin tener que cruzar caminos. 

Aquí les dejo una imagen del nuevo calentador:


Ahorita lo tenemos en fase de pruebas debido a que nunca había manejado esa marca pero tan pronto tenga el veredicto se los haré saber para que ustedes también puedan o hacerse de uno igual con menor o mayor cantidad de watts dependiendo de sus necesidades (1 watt por litro), o bien buscar otra opción.

¡Hasta la próxima entrega!

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Actualización 21/10/2016

El calentador hasta el momento ha funcionado bien y ha entibiado con éxito los cerca de 80 litros de agua que tenemos en el acuaterrario grandote. De cualquier forma los seguiré informando en caso de que tengamos alguna situación con él.

martes, 18 de octubre de 2016

Indiana Mikey

Hoy les quiero compartir un par de videos en donde aparece Mikey pues... siendo Mikey. Explorando lo inexplorado. Enseñándole a sus hermanos mayores como llegar a tierra firme y conquistar la cima (o algo parecido). Mikey sin duda es el más intrépido de los 4 y el que desde un inicio nos sorprendió con su espíritu aventurero y sus ganas de escalar todo lo que tuviera en frente (desde un castillo hasta una pequeña montaña).



Sin más preámbulos, con ustedes... Indiana Mikey:

Un vídeo publicado por Juan Canales (@draghad) el


Un vídeo publicado por Juan Canales (@draghad) el

lunes, 17 de octubre de 2016

Día de limpieza

Sin duda uno de los días más pesados de toda la semana es el día de limpieza (por lo regular cae en sábado o domingo). Y es que desde que adquirí la caja de plástico que ahora es hogar de Mikey y Leo (originalmente también era de Rafa pero ya todos sabemos en que resultó aquello: se dijeron cosas, hubo mordiscos, en fin), vaciar cerca de 70 litros de agua y volver a llenar tremendo espacio cubeta a cubeta, es verdaderamente una tarea titánica. 



Aquí quiero hacer un paréntesis para darle crédito a mi hermana ya que ella fue la primera en llevar a cabo tan ardua labor cuando recién estábamos en proceso de mudanza para los 3 mosqueteros.

Bien, volviendo al tema que nos compete. Conforme han pasado numerosos días de limpieza he ido agarrando callo y encontrando formas más sencillas de hacer las cosas (y es que las tortugas no son precisamente los animalitos más limpios del mundo, por lo que los días de limpieza son frecuentes y más si no se cuenta con un buen filtro... por fortuna ese no es mi caso). Por ejemplo, para hacer el vaciado del acuaterrario uno pensaría que necesita de algún instrumento místico, mágico y musical para hacer el trabajo, y no, lo único que se necesita es un pedazo de manguera (que pueden conseguir en cualquier ferretería) lo suficientemente largo como para poder llevar el agua del acuaterrario hasta el desagüe más cercano (yo en lo particulas tengo una de 3 metros que muestro a continuación).



Ahora bien, para que la manguera nos ayude a succionar hasta el último pedazo de excremento y residuos de comida (las tortugas no se caracterizan por ser los animalitos más limpios del mundo), tendremos que llenar la manguera con agua para sacar todo el aire de la misma. Posterior a eso debemos colocar nuestros dedos en ambas boquillas para generar vacío en la manguera. Finalmente basta con introducir uno de los extremos en el agua de nuestro acuaterrario y el otro a una cubeta, retirar nuestros dedos de ambas boquillas y ¡listo! a esperar a que suceda la magia. A mi normalmente me lleva de 4 a 5 cubetas el vaciar absolutamente toda el agua sucia de mis pequeñines por lo que repito el mismo proceso una y otra vez hasta terminar.

Después de vaciar el acuaterrario y de limpiar las paredes del mismo, sigue la parte más tediosa que es la de volverlo a llenar. Por desgracia aún no he conseguido una manguera que tenga las características que estoy buscando para hacer del día de limpieza un día de campo, pero bueno, ad interim, no me queda más que recurrir a una serie interminable de cubetazos que van a terminar por transformar mis brazos en armas letales.

Como paso final, pero no menos importante, hay que preparar esa agua que acabamos de verter en nuestro acuaterrario para que sea apta para nuestras tortugas. Aunque no lo crean el agua que sale de nuestros grifos contiene altas cantidades de cloro y esto irrita los ojitos de nuestros pequeñines. Por lo tanto hay que recurrir a productos que nos ayuden a eliminar ese cloro y a brindarles un espacio saludable. Hasta hace unos días yo usaba un líquido anti-cloro que había comprado para el último de la dinastía Borby (pez beta) pero ayer que fui de "shopping" a la Jungla de Timo de San Agustín (mi tienda de mascotas predilecta hasta el momento), me recomendaron otro liquidito que actúa mucho más rápido en el agua y es especial para tortugas y otros reptiles.




El líquido del que hablo es el que está al lado derecho (10 ml por cada 38 litros de agua). El del lado izquierdo es otro liquido que tiene Vitamina A, la cual ayuda a prevenir algunos problemas que pueden presentarse en los párpados de nuestras tortugas.

Y antes de regresar a mis animalitos a su acuaterrario, algo que he estado haciendo, por recomendación del veterinario, es el tallar el caparazón de mis pequeñines con un cepillo de dientes de cerdas suaves para limpiarlo de cualquier cosa que pueda habérsele pegado a su escudo protector mientras nadaban en sus propios desechos (cosa que no podemos evitar).



De nuevo he escrito más líneas de las que pensaba, pero como siempre espero que esta información, aunque muy básica, les sea de utilidad.

Gracias por su atención y ¡hasta la próxima!

sábado, 15 de octubre de 2016

Luz solar y alternativas

Durante nuestra primera visita al veterinario, y por fortuna única hasta el momento, recibí mucha información con respecto al cuidado de mis (ninja) tortugas (adolescentes mutantes) como ya he mencionado en otras publicaciones pero uno de los puntos más importantes fue el de la importancia de la luz solar.

No quiero sonar exagerado (bueno, tal vez un poco) pero el Sol, para las tortugas, es igual a VIDA. Como de seguro sabrán nuestros pequeños amiguitos reptiles son animales de sangre fría, esto significa que (en términos sencillos) ellos no producen calor por lo que de entrada necesitan de la luz solar para almacenar todo el calor que necesitan para poder llevar acabo procesos como el de la digestión. De hecho, si alguna vez han visto a sus tortugas hacer lo que en nuestro mundo serían excelentes poses de yoga es precisamente porque están tomando provecho de todas bondades de esta estrella maravillosa.



Es por eso que también es importante que nuestras tortugas tengan un lugar en donde puedan reposar, secar y tomar el Sol cuando les venga en gana (no todo es nadar, nadar, nadar... aunque probablemente Dory de Buscando a Nemo este en total y completo desacuerdo).

Algo que hay que tener en cuenta es que cualquier panel de vidrio filtrará la luz ultravioleta del Sol que es básicamente la que necesitan nuestras tortugas, por lo que es recomendable sacarlas a un lugar en donde pegue directo el Sol (si hacen esto por favor no las pierdan de vista, uno nunca sabe en que momento un gato o un pájaro puedan hacer acto de presencia y... bueno, tomen precausiones) o bien ponerlas detrás de una ventana que pueda abrirse y que tenga barrotes o mosquitero (de nuevo, para evitar percances).

Ahora bien, si por alguna razón nuestro hogar o habitación no tiene ventanas o bien está mal iluminada, siempre se puede recurrir a productos que están diseñados para este tipo de problemas con la finalidad de que nuestros animalitos reciban aquello que necesitan para estar saludables. Uno de estos productos es el foco de la marca Exo-Terra:


Según los comentarios del veterinario, este tipo de focos (que pueden ser colocados en cualquier tipo de lámpara) son los ideales para las tortugas tortugas en general ya que los rayos UVB son precisamente los que reciben del Sol en la naturaleza para que sus cuerpos puedan funcionar correctamente. Además de los rayos UVB también existen los UVA y los UVC, pero como no soy un erudito en el tema, me puse a investigar y esto fue lo que encontré al respecto (esta es la liga original):
  • UVA: Es la luz ultravioleta de onda larga y baja energía. Este tipo de luz promueve la alimentación, la reproducción y el comportamiento general, a su vez afecta la manera en como ven los reptiles, no solo los objetos en si, sino también como perciben la intensidad de los colores. Este tipo de luz atraviesa vidrios comunes y es necesario a lo largo de toda la vida.
  • UVB: Corresponde a la onda media que es de mayor energía pero menor penetración que la anterior. Este tipo de luz es la mas importante para las tortugas (como había mencionado) ya que ayuda a la síntesis de la vitamina D3 en la piel la cual ayuda a la asimilación del calcio, que evita las enfermedades por déficit de este elemento (enfermedad metabólica ósea, deformaciones de caparazón, entre otras cosas). Este tipo de radiación no traspasa los vidrios por lo que es importante que para una buena exposición a estos rayos sea directamente al sol.
  • UVC: Este tipo de rayos no llegan casi nunca a la Tierra ya que son absorbidos por las capas altas de la atmósfera y estratosfera. Son rayos sumamente perjudiciales para la salud ya que afectan gravemente a los ojos y a la piel (cáncer).

En esa misma página también se habla de la intensidad con la que estos rayos se emiten en los focos comerciales lo cual también es importante considerar a la hora de adquirir alguno de ellos ya que las necesidades varían dependiendo la especie:
  • Tubos 2.0: Especiales para serpientes, lagartos y anfibios, la luz UVB emitida no es suficiente para la síntesis de la vitamina D3. Estos tubos son muchas veces combinados con factor 5.0 y 10.0 para reforzar la luz visible. La luz emitida favorece el desarrollo de plantas y tiene una alta producción de luz visible.
  • Tubos 5.0: En teoría estos tubos emiten un 5% de UVB y un 30% de UVA, el resto va en luz del espectro visible. Son aconsejables para especies tropicales y subtropicales que reciben la luz filtrada por la vegetación del lugar. Estos tubos deben ser ubicados a una distancia de 30 cm del área de asoleo. Una distancia mayor reducirá el efecto y una menor afectaría a las tortugas por mayor incidencia de radiación.
  • Tubos 8.0 y 10.0: Son especiales para especies de ambientes desérticos ya que emiten un 8% de luz UVB y hasta un 35 % de luz UVA. Son efectivos hasta 50 cm de distancia.

Para las tortugas basta con tener un foco con tubo de 5.0 (si ven la imagen de cerca notarán la leyenda "Repti Glo 5.0") el cual tendrá una duración aproximada de 6 meses (aunque algunos aseguran que pueden durar hasta un año). Pasado ese periodo de tiempo el foco deja de emitir rayos ultravioleta y ya sólo emite luz como un foco cualquiera, por lo que es recomendable anotar el día en que se empezó a utilizar para poder reemplazarlo a tiempo.

Y bueno, ya para concluir esta publicación (que resultó ser más larga de lo que esperaba), no me queda más que hacerles la misma recomendación que me hizo el veterinario con respecto a este tema: si por alguna razón no cuentan con un espacio en donde las tortugas puedan tomar el Sol, hagan el esfuerzo de sacarlas durante el fin de semana aunque sea una media hora ya que si bien los focos para reptiles son muy útiles y nos ayudan a darles una mejor calidad de vida a nuestras tortugas, estos no sustituyen ni reemplazan lo que la propia madre Gaia ("la Tierra" para los amigos) le da a estos grandes maestros.

Realmente espero que esta información les sea de utilidad. 

¡Hasta la próxima!

Anatomía del caparazón

Hace poco me topé con una liga en donde se nombraban todas las partes del caparazón de las tortugas y me pareció lo suficientemente interesante como para compartirlo con todos ustedes ya que es algo que la mayoría de nosotros no sabemos pero que no está de más conocer dado que el caparazón es una de la partes más importantes en nuestras tortugas y es quien nos puede dar indicios de la salud de las mismas (después hablaré un poco de esto).

El texto que se encuentra a continuación es una copia fiel del artículo original el cual puede ser consultado directamente en esta liga.

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Nombres de los escudos de las tortugas

El caparazón de las tortugas está divido en numerosos escudos rígidos que protegen el hueso (el caparazón está formado por huesos y, encima de éstos, escudos). Según la especie pueden tener más o menos escudos en distintas partes de su caparazón, incluso existen especies sin ningún escudo (tortugas de caparazón blando, Trionychidae y Carettochelyidae).

Distinguiremos entre los escudos del caparazón y del plastrón:

Escudos del caparazón:
Básicamente podemos diferenciar entre tres tipos de escudos distintos:

- Vertebrales: Son los escudos situados en medio del caparazón, resiguiendo la columna vertebral de la tortuga. En la mayoría de especies podemos observar 5 escudos vertebrales, aunque su tamaño y forma pueden ser muy distintos.
- Costales: Son los escudos que encontramos a ambos lados de los escudos vertebrales. La mayoría de especies presentan 4 escudos costales en cada lado, y suelen ser de un tamaño mayor al resto de escudos del caparazón.
- Marginales: Son los escudos que encontramos en el borde del caparazón. Estos escudos están doblados, por lo que son visibles desde la parte superior y desde el plastrón. Su número varía dependiendo de la especie. El escudo que podemos observar encima de la cabeza recibe el nombre de nucal, y los escudos que encontramos encima de la cola se llaman caudales (o supracaudal si es un único escudo).
Algunas especies poseen escudo supramarginales, que se situarán entre los escudos costales y los escudos marginales.

Escudos del caparazón de una Testudo hermanni

Escudos del caparazón de una Malacochersus tornieri


Escudos del plastrón: 
Básicamente podemos diferenciar entre nueve tipos de escudos distintos:
- Gulares: El escudo gular se encuentra en la zona más cercana al cuello. Este escudo puede ser único o puede estar dividido en dos, según la especie de que se trate.
Algunas especies poseen un escudo gular extremadamente largo, que utilizan los machos para luchar entre ellos en la época de celo.
- Intergular: Algunas especies poseen un escudo único que se sitúa entre los escudos gulares, humerales y pectorales, en la zona central del caparazón.
- Humerales: Son dos escudos que protegen las patas delanteras de las tortugas.
- Axiales: Son dos pequeños escudos que protegen la parte interna del plastrón, en la zona de las patas delanteras. Algunas especies no poseen estos escudos.
- Pectorales: Son dos escudos de gran tamaño que se encuentran en la zona central superior del plastrón.
- Abdominales: Dos escudos de gran tamaño situados en la zona central inferior. Suelen ser los de mayor tamaño en muchas especies.
- Inguinales: Son dos pequeños escudos que protegen la parte interna del plastrón, en la zona de las patas traseras. Algunas especies no poseen estos escudos.
- Femorales: Dos escudos que protegen las patas traseras.
- Anales: Son los dos escudos más próximos a la cola.
Algunas especies poseen también un escudo interanal, situado entre los dos escudos anales. Suele ser de tamaño muy reducido.
También podemos encontrar en algunas especies los escudos inframarginales, que se situarán entre los escudos abdominales o pectorales y la parte inferior de los escudos marginales.

Escudos del plastrón de una Trachemys scripta elegans

Escudos del plastrón de una Kinosternon cruentatum

Escudos del plastrón de una Chelodina mccordi

viernes, 14 de octubre de 2016

Alimentación

Cuando recién adquirí a mis pequeños héroes con caparazón (haciendo alusión al tema de entrada de la caricatura de las tortugas ninja en los 80) yo no sabía gran cosa con respecto al régimen alimenticio de las tortugas semi-acuáticas así que como buen novato y cuidador inexperto decidí irme a la segura y compré el primer botesito de comida para tortugas que me recomendaron que es el que se muestra en la foto de abajo (que son mini bolitas, muy parecidas a las croquetas de perros pero en versión mini):


Todo era miel sobre hojuelas hasta que nos dimos cuenta que el pequeño Mikey, más que ver las mini bolitas como algo para ser devorado (que era como las veían sus hermanos), las usaba como una especie de juguete ya que cada vez que tomaba un bocado inmediatamente lo escupía (mi teoría era que estaba muy duras para él). Cosa que me preocupó bastante como padre primerizo. Así que me di a la tarea una vez más de investigar que más podía darle de comer para que no se me fuera a morir por inanición (yo siendo bastante dramático en el momento) y encontré que ellas podían comer prácticamente cualquier verdura o fruta (salvo algunas pocas excepciones como la espinaca o cualquier tipo de hongo).

Lo primero que intentamos darle algo que tuviéramos a la mano, así que intentamos con la zanahoria pero aparentemente las tiritas color naranja no les parecieron apetitosas a ninguna de las 4 (aunque creo que Donny si alcanzó a comerse una pero aceptémoslo, él devora todo).

Así que después del rotundo fracaso de la zanahoria intentamos con pequeños pedasitos de sandía y de melón. Afortunadamente la sandía si tuvo el impacto que esperábamos con Mikey y al menos en ese momento ya podíamos estar un poco más tranquilos porque ya había comido.

No tarde mucho tiempo en ir a otro acuario, que está en el centro de la ciudad, y ahí me recomendaron unos tubitos de una marca con bastantes menciones al menos en la red (tienen una amplia gama de productos para toda clase de reptiles):


Al principio yo estaba un tanto escéptico por el tamaño de los tubitos además de que no sabía que tan duros iban a estar. Sin embargo, cuando vi a Mikey devorarlos presuroso y con aquel gusto que hasta daba envidia, sabía que había dado en el blanco. Resulta que esos tubitos se ablandan en el agua, lo que hace que sean fáciles de deglutir por tortugas de cualquier tamaño

Si bien esta segunda opción es un poco más cara (al parecer Mikey tiene paladar gourmet), definitivamente fue y sigue siendo el pan de cada día de mis pequeñines.

Otras opciones que pueden considerar y que descubrí en aquella visita al veterinario cuando Rafa y Leo me sacaron uno de mis primeros sustos, son los pescados y mariscos frescos así como también carne y pollo crudos. Al parecer cuando las tortugas están en sus años mozos (o sease, cuando son jóvenes) son bastante carnívoras y pueden consumir esos alimentos en pequeñas cantidades y sin abusar porque luego se acostumbran y pueden dejar de comer sus tubitos. Conforme pasa el tiempo van cambiando su dieta y se hacen adeptas a los vegetales y a las frutas (nada de pizza...).

De hecho, en esa visita al veterinario conseguí pequeños gusanitos de tierra y escarabajos que a mis tortugas les supieron a gloria. Hubieran visto como se alocaban cuando les daba 3 de esos gusanos a cada una en la mañana (aunque debo admitir que me daba mucha cosita darles comida viva...).

Bueno, realmente espero que esta información les sea de utilidad. Cualquier duda, sugerencia o comentario es bienvenido. 

¡Hasta la próxima! y felices nados (pequeño tributo a Bob Ross).

miércoles, 12 de octubre de 2016

Reconociendo a mis tortugas

Muchos me han preguntado cómo identifico a mis tortugas cada vez que presumo alguna foto o alguna graciosada de ellas y mi respuesta siempre es la misma: por un pequeño patrón geométrico que tiene cada una de ellas en su caparazón.




Como Mikey siempre ha sido el más chiquito (y es el único con el caparazón anaranjado), nunca tuve problemas para identificarlo. El problema estaba con los otros 3, ya que eran muy parecidos cuando llegaron a mis manos hace poco más de 2 meses. Fue por eso que me di a la tarea de buscar una forma de identificarlos para así poder tutearlos cada vez que los viera o saludara (si, le hablo a mis tortugas y siempre que salgo de la casa me despido de cada una de ellas) y así fue como di con sus marcas distintivas.

Además de eso, algo que siempre ayudó fue el hecho de que desde pequeñitas siempre tuvieron sus personalidades muy bien definidas:
  • RAFA siempre ha sido el más temeroso. Cada vez que uno entra sin avisar a la habitación o que hace un movimiento súbito, es el primero echarse a correr (en sentido figurado) como si no hubiera un mañana. De hecho cuando apenas llegaron, el era el que se la pasaba en una esquinita, alejado de todos, escondido en una plantita de plástico que les habíamos puesto de adorno.
  • LEO es el más tranquilo y es uno de los que hace más gracias (superado por Mikey). Ahorita la novedad es la forma en la que se la pasa encima en una tapa de plástico cual barco pirata (que fue de una pecera que sirvió como hogar de 3 o 4 peces Beta - la dinastía Borby - a los que les di un hogar hace ya unos años). Realmente necesitan ver para entender lo simpático que es su acto.
  • DONNY desde pequeño fue el más goloso de los 4 (no por nada es el más grandote) y el más vivo cuando de comida se trataba. Cuando todos convivían en el mismo acuaterrario, él era el primero en echar la mordida y no dudaba en echársele encima a sus hermanos con tal de comer hasta quedar satisfecho (o empachado).
  • MIKEY a pesar de ser el más pequeño siempre ha sido el más temerario. Fue el primero en escalar una montañita que les habíamos comprado como adorno al acuaterrario y siempre es el primero en explorar territorio desconocido cuando ha habido cambio de habitat. Digamos que es el que marcó la pauta.



Hasta hoy en la mañana no sabía el tamaño que tenía mis tortugas pero gracias a mi hermana (a quien también le agradezco que haya limpiado el acuaterrario de Donny y Rafa) les puedo compartir las medidas del caparazón de cada una de ellas (únicamente el largo, queda pendiente el ancho):
  • DONNY - 8.5 cm (El Tamal)
  • RAFA - 8.3 cm
  • LEO - 8.0 cm
  • MIKEY - 6 cm (Mi chiquitín)

Bueno, ahora ya conocen un poco más de los simpáticos animalitos que me han robado el corazón y que me han inspirado a escribir este blog.

¡Hasta la próxima!

martes, 11 de octubre de 2016

Susto que no pasó a mayores

Hace varias semanas, mientras observaba a mis tortugas nadar y hacer cosas de tortugas, noté que Rafael tenía una como manchita blanca muy pequeña y casi impeceptible en su cuello. Al principio no le di tanta importancia ya que después de buscar información en la red, no encontré nada particularmente alarmante por lo que en ese momento no le di más vueltas al tema (cosa rara en mi) y lo catalogué como algo completamente normal.

Sin embargo, unos días después empecé a notar que la manchita se hizo más notoria y descubrí que Leonardo (para colmo), portaba una manchita muy similar a la que le había visto a Rafa en un inicio, por lo que mi primera reacción fue la de entrar en un pánico silencioso y letal, de esos que no te dejan pensar en otra cosa que no sea una solución al problema presente.



Comencé a investigar más al respecto y a pedir opinión de personas en Estados Unidos con mucha más experiencia que yo en tortugas (al menos en apariencia), pero no encontré una respuesta que me convenciera totalmente, por lo que me di a la tarea de localizar a un veterinario de animales exóticos para terminar de una vez con esto y descubrir exactamente que era lo que tenían mis tortugas.

Por fortuna di con esté lugar http://www.acutus.com.mx/ convenientemente ubicado muy cerca de mis rumbos habituales. Hablé con los doctores a través de su página de Facebook e hice una cita para que, aprovechando la vuelta, revisaran a mis 4 tortugas ninja.

Para no hacer el cuento largo, el doctor me dio mucha información muy útil sobre el cuidado de mis tortugas (conocimiento que iré compartiendo poco a poco) y me explicó que lo que tenían tanto Leo como Rafa eran pequeñas heridas que se habían hecho ellos mismos con sus caparazones (por fricción) al momento de levantar sus cabezas. Fue en ese momento cuando el alma me volvió al cuerpo.

El doctor me sugirió que a ambas les aplicará un producto llamado Microdacyn (que se puede conseguir en cualquier farmacia) 2 veces al día directamente en la herida (ya sea directo del bote o con un cotonete), dejándolas secar durante 10 minutos antes de volverlas a introducir a su acuaterrario.



Sobra decir que después de una semana las heridas de ambas tortugas cicatrizaron y sanaron perfectamente sin ninguna repercusión. Mi consejo es que siempre acudan a un experto cuando noten alguna anomalía en sus animalitos. Al final de cuentas es nuestra responsabilidad darles una buena calidad de vida.

Vaya que ser padre primerizo realmente es agotador...